Lo más importante…Qué es la ventana metabólica
Ponte en situación. Acabas de terminar una sesión de entrenamiento muy exigente, llena de HIIT y ejercicios de alta intensidad. Tu corazón comienza a bombear con bastante fuerza, has sudado mucho más de lo habitual, lo que quiere decir que has vaciado casi al completo tus reservas de energía, por lo que sientes cómo tu cuerpo comienza a pedirte esa dosis de recuperación. Justo en ese preciso momento, ni antes ni después, es cuando empieza tu ventana metabólica.
La explicación más clara sería decir que la ventana metabólica es el período de tiempo limitado que se produce tras finalizar un entrenamiento intenso, en el cual tu cuerpo está especialmente receptivo a la ingesta de proteínas y carbohidratos y, por lo tanto, a poder absorber todo tipo de nutrientes. A lo largo de este tiempo sucede que:
- Los músculos están mucho más sensibles a la insulina, por lo que tienden a asimilar mejor esa ingesta y absorción.
- Tu flujo sanguíneo es más elevado, lo que facilita el transporte de los nutrientes a las células.
- Se produce un fomento de la síntesis proteica muscular y, en definitiva, una mayor recuperación del organismo. El cuerpo se encuentra en modo reparación, lo que busca de forma constante reponer energía y regenerar los tejidos.