Cinco opciones para transportar los esquís en el coche
Portaesquís de techo. Es el sistema más popular y utilizado para transportar los esquís. Este accesorio está diseñado para colocarse sobre unas barras transversales en el techo del coche. En este caso, las puntas de los esquís tienen que ir colocadas hacia atrás. Antes de comprar uno de estos sistemas de transporte, es aconsejable que busques uno que sea universal y que permita quitar el portaesquís, por ejemplo, y poder acoplar las barras para un portabicicletas o un cofre.
Portaesquís magnético. Este tipo de sistema de anclaje se sirven de una base imantada que permite sujetar el portaesquís al techo del vehículo. Cada modelo viene acompañado de una ficha técnica que detalla el número de esquís y tablas de snowboard que puede transportar, la velocidad máxima a la que te permite circular, así como la capacidad de adherencia. Cuanto más elevada sea, más seguro será el viaje. Un consejo: cuando llegues a tu destino, recuerda retirar el portaesquís.
Cofre de techo. Este espacio de almacenaje auxiliar nos permite llevar los esquís y resto de material de forma segura cuando viajamos en familia o con amigos. Sin duda, la gran ventaja de esta alternativa es el espacio libre que deja en el interior del coche para transportar el resto del equipaje de los ocupantes.