Bici elíptica: ventajas y desventajas
La bicicleta elíptica ha ido ganando espacio en los gimnasios y también en los hogares. Algo que no nos extraña, ya que ofrece la posibilidad a todo aquel que la usa de realizar un entrenamiento completo de bajo impacto. Como pequeño spoiler te diremos que, a diferencia de la estática, simula el movimiento de correr o caminar, pero sin hacer ningún tipo de presión directa sobre las articulaciones. Justo por ello es perfecta para personas con problemas de rodilla o de cadera, o simplemente para los que buscan un ejercicio cardiovascular intenso sin tener riesgo a lesionarse.
Otra de las cosas que nos encanta de la bicicleta elíptica es que te permite trabajar tanto la parte inferior como la superior en la misma sesión, gracias a sus manillares móviles que harán activar tus brazos, hombros y torso. A nosotros, personalmente, es algo que nos encanta y, por ello, consideramos que es una máquina de fitness muy útil para cualquier deportista. Además, todos los modelos incluyen varios niveles de resistencia, lo que hace que se adapte tanto a los principiantes como a los deportistas más avanzados. Y, además, genera mayor quema de calorías en menor tiempo en comparación con la bici estática tradicional, sobre todo si alternas intensidad con resistencia. Ideal si este es tu objetivo principal.
Son muchas las ventajas, pero también te diremos que hay ciertas cuestiones que pueden echarnos atrás si tenemos dudas sobre un tipo de bici u otra. Al principio, el movimiento que se realiza encima de esta bici puede resultar algo poco natural. A esto hay que sumar su tamaño y presupuesto. Ambos más elevados que el de una bici estática tradicional. Cuestiones que debes tener en cuenta ante una elección de este tipo para tu hogar.






