Cuáles son los 7 chakras del cuerpo y su significado

Una vez que ya sabemos cuál es el significado más real de chakra, el siguiente paso es saber para qué sirven.

Una de las funciones principales por las que destacan es la gran capacidad que tienen para distribuir la energía vital, es decir, de actuar como acceso de entrada y salida de esa energía. Se encargan, sobre todo, de absorber ese carburante energético procedente de la luz, de la tierra o del aire para hacerlo llegar a aquellas zonas físicas corporales que tanto lo necesitan.

Además, otro de los puntos claves de las características de los chakras es que al estar relacionados con zonas distintas del cuerpo, su equilibrio proporciona tanto salud emocional en la confianza propia o en el amor, como salud física del sistemas digestivo o respiratorio, entre otros.

Cuanto más tratas de equilibrar los chakras y más tratas de saber cómo funcionan, el desarrollo del autoconocimiento aumenta con creces y, por supuesto, la conciencia y la conexión con lo espiritual es mucho mayor.

Si los chakras están desequilibrados o, incluso, bloqueados se pueden llegar a producir un malestar general. Por lo tanto, trabajar para mantenerlos estabilizados es esencial para que la energía fluya.

Después de saber la importancia de la liberación de bloqueos energéticos, promover la paz interior, la relajación y la armonía también es una de las funcionalidades más relevantes de los chakras.

Cuáles son los 7 chakras del cuerpo será la pregunta que más te hayas repetido. Pues bien, no pierdas detalle de lo que te contamos y conoce los principales puntos energéticos ubicados en el interior de tu cuerpo para poder controlarlos y disfrutar de un bienestar armonioso. 

1. Chakra Raíz, también conocido como Muladhara. Este es el chakra localizado en la base de la columna vertebral, en la zona más cercana al coxis. El color por el que se le conoce es el rojo y el elemento al que hace referencia es a la Tierra. Su objetivo principal es servir para aportar tanto seguridad, equilibrio y estabilidad con respecto a los sentimientos como conexión con su elemento, la Tierra. En el caso de que este chakra se encuentre en desequilibrio se podrán llegar a tener emociones negativas como, por ejemplo, ansiedad, angustia, inseguridades, miedo o, incluso, problemas relacionados con lo financiero. Está totalmente asociado a órganos como el sistema óseo, el excretor, las glándulas suprarrenales y la columna vertebral. Si este punto de energía está estabilizado nos sentiremos llenos de seguridad para afrontar el día a día. 
2. Chakra Sacro o Svadhisthana. Localizamos a este chakra justamente bajo el ombligo, en la conocida región pélvica. Aunque su elemento es el agua, su color destacado es el naranja. Su función prioritaria es mejorar y alinearse con el disfrute de la vida, desde la creatividad hasta, incluso, el placer y las emociones relacionadas con la sexualidad. Su bloqueo o desequilibrio puede afectar tanto a la apatía como a la culpa o a los problemas sexuales o creativos. El Chakra Sacro está asociado a órganos como la vejiga, los riñones o el sistema reproductor del cuerpo humano. 
3. Chakra del Plexo Solar o Manipura. Localizamos este centro de energía entre el diafragma y el ombligo. El color con el que se relaciona es el amarillo y el elemento al que hace referencia es al fuego. Este chakra se centra en todo lo que tiene que ver con el poder personal. Su objetivo es favorecer tanto la autoestima como la voluntad y la confianza en uno mismo. Es uno de los más importantes ya que se centra en fomentar y mejorar la fuerza interior. Si este chakra se encuentra inestable o totalmente desequilibrado puede causar desde inseguridad o falta de energía y propósito hasta problemas asociados a enfermedades digestivas o estrés. Está alineado de forma directa al hígado, al estómago, el páncreas y, en general, al sistema digestivo. 
4. Chakra del Corazón o Anahata. Destaca por estar localizado muy cerca del corazón, casi en el centro del pecho. Sus colores son tanto el rosa como el verde y el elemento con el que se asocia es el aire. Podemos definir a este centro de energía como el chakra del perdón, de la empatía y comprensión pero, sobre todo, del amor pasional incondicional. Es una conexión directa entre las emociones espirituales y físicas y su aspecto emocional son desde tener amplia capacidad para perdonar a los demás como de sentir amor propio. Las relaciones saludables son su prioridad y un desequilibrio en este chakra puede desencadenar desde resentimiento y aislamiento en uno mismo hasta dificultades cardiacas. Actúa como un puente entre los chakras físicos y espirituales. Se asocia a órganos como los pulmones, el corazón y el sistema circulatorio en general. 
5. Chakra de la Garganta o Vishuddha. Se ubica, como su propio nombre indica, en la garganta. Cuando hablamos de este chakra estamos haciendo referencia al color azul claro y al espacio, éter, como elemento. Destaca por ser experto en expresar de forma clara y concisa los pensamientos y, también, los sentimientos. Su principal función es ser honesto, estar preparado para decir la verdad y todo lo que tenga que ver con la expresión y la comunicación con las personas. Cuidar y mantener la confianza tanto para escuchar como para hablar es su aspecto emocional y si este chakra está bloqueado se tendrá desde problemas para comunicarse, como miedo a hablar, hasta dolor en la garganta. Los órganos vitales con los que se asocian son las glándulas tiroides, las cuerdas vocales y la garganta.
6. Chakra del Tercer Ojo o Ajna. La ubicación de este chakra está en las últimas zonas superiores de la columna vertebral. Se localiza en la frente, entre las cejas. Su color de referencia es el índigo y el elemento con el que le relacionamos es la luz. Podemos decir que este punto energético del cuerpo humano se encarga de conectar con la sabiduría interna de cada persona. Ayuda a incrementar la imaginación y a ser el centro de la intuición. Aporta gran claridad a la mente y si está desestabilizado los pensamientos pueden llegar a mezclarse y a alcanzar el caos. Los órganos asociados a el Ajna son el cerebro, los ojos, el cerebro y todo lo relacionado con el sistema nervioso central.
7. Chakra Corona o Sahasrara. El último de los principales chakras está localizado en la parte superior de la cabeza. Se vincula con el color blanco o con el violeta y el elemento con el que le relacionamos es con la conciencia pura. Se encarga, principalmente, de representar la conexión existente entre el cosmos y el cuerpo. Está muy alineado a la conexión espiritual y encontrar la paz es uno de sus principales objetivos. Los órganos con los que se asocia son con los que forman parte del sistema nervioso superior y, por supuesto, con la glándula pineal y el cerebro y un desequilibrio en el Sahasrara puede ocasionar una profunda depresión.