¿Cómo se daña tu tabla de kitesurf?
Sal, arena, guijarros, conchas... Esta encantadora mezcla suena más como unas vacaciones, ¿verdad?
Pero también puede causar desgaste en tu tabla de kite. Ya sea que esté en la playa o junto al lago, los elementos naturales pueden ser abrasivos, afilados o perforantes y, por lo tanto, pueden dañar su tabla de kite. No te estreses: estamos aquí para ayudarte a cuidar tu equipo.
Además de las habituales fugas en los tubos y las válvulas, existen otra serie de daños típicos que pueden causar ciertos problemas a tu kite. Nosotros te vamos a explicar las más comunes a las que es bastante común que te enfrentes si utilizas de forma recurrente tu kitesurf:
- Roturas en el canopy: es decir, en el tejido principal a causa de enganchones, caídas sobre las rocas o desgaste a causa de tu UV.
- Daños en los bladders internos: suelen ocurrir por una sobrepresión o una mala colocación, así que ten mucho cuidado y fíjate bien antes de hacer algún tipo de cambio.
- Despegue de las costuras: el uso intensivo o simplemente el paso del tiempo pueden llegar a ocasionar que se aflojen algunas uniones clave.
- Desgaste de líneas y bridajes: la combinación de tensiones mal compensadas junto a la arena y la sal pueden acelerar su deterioro. Es más común de lo que te puedes imaginar.
- Válvulas deterioradas: ya sea por el calor, los pliegues o por el envejecimiento del adhesivo.