Los ejercicios de estimulación son muy importantes para desarrollar las cualidades psicomotrices de los niños. Te proponemos una lista de actividades apta para niños de entre 1 y 6 años.
Hacer ejercicio con los más pequeños de la casa es un hábito saludable que permite desarrollar las funciones motoras, el lenguaje y la estimulación visual de los niños. De este modo, la gimnasia durante los primeros años de vida se basa en una serie de ejercicios que permiten fomentar la capacidad de exploración y el descubrimiento de las propias potencialidades del niño.
Elige una habitación amplia y despejada para que el pequeño pueda explorar el espacio a su antojo. Preparar un pequeño circuito con juguetes y accesorios es una buena idea. A la hora de poner en marcha la actividad, puedes basarte en las seis acciones que favorecen el desarrollo psicomotor de tu pequeño o pequeña deportista: rodar, mantener el equilibrio, lanzar, gatear, columpiarse y saltar.
El objetivo de esta actividad es trabajar la motricidad a través de juegos que ayuden a tus hijos a tomar conciencia de las distancias.
➤ Juego 1: lanzar la pelota
Coloca a tu hijo sobre una esterilla y pídele que lance la pelota hacia un punto concreto. En función de su evolución, puedes ir alejando el destino para que lance la pelota más lejos. También podéis pasaros la pelota sin que toque el suelo.
➤ Juego 2: hacer rodar la pelota
Siéntate frente a tu hijo con las piernas separadas. Haz rodar la pelota suavemente para que la coja. También podéis hacer rodar la pelota por encima de una rampa o por debajo de una mesa.
El sentido del equilibrio es esencial para el desarrollo de tus hijos. En la motricidad, el sistema vestibular se encarga de regular el sentido del movimiento y del equilibrio, ese que nos permite situar nuestro cuerpo en el espacio, controlar los desplazamientos y ser conscientes del entorno. Haz que el pequeño descubra el placer de coordinar sus movimientos con total seguridad.
➤ Juego 1: mantener el equilibrio sobre una pelota
Cuando los niños se sientan o se tumban sobre una pelota de pilates, ambos lados de su cerebro están activados para mantener su cuerpo en equilibrio.
➤ Juego 2: utilizar un kit de equilibrio
Crea un circuito utilizando un kit de equilibrio. Puedes apilar las bases para acentuar la pendiente del recorrido o aumentar la dificultad del ejercicio. Coloca pequeños obstáculos para que tenga que pasar por encima y agarrarlos.
Girar sobre sí mismo, alrededor de un eje, dar una voltereta o rodar lateralmente haciendo la croqueta. Todos estos movimientos favorecen la capacidad de orientarse en el espacio y concentrarse en las sensaciones corporales.
➤ Juego 1: la voltereta
Pídele que se ponga en cuclillas y que coloque las manos en el suelo mientras pega su barbilla sobre el pecho. Después ayúdale a inclinarse hacia adelante para dar la voltereta. Puedes sostener su nuca si es necesario.
➤ Juego 2: hacer la croqueta
¿Recuerdas esa sensación al dejarte caer rodando por una colina? Para acompañar a tu hijo, pídele que se tumbe, que estire los brazos hacia arriba y que mantenga el cuerpo rígido. Después, empújalo para que ruede como un barril.
¿Tus hijos empieza a gatear para desplazarse? Genial, gatea con ellos y ponles algunos obstáculos para que hagan cambios de dirección. Estimular a los niños para que gateen les permitirá trabajar la fuerza de los brazos y las piernas.
➤ Juego 1: el túnel para gatear
Prepara un túnel y pídele a tu hijo que lo atraviese gateando y después regrese hacia atrás reptando como si fuera una serpiente. Puedes dividir el túnel en 2 partes y atravesarlo de 2 formas distintas.
Estos juegos le permitirán gestionar positivamente su estrés, desarrollar sus reflejos, tomar conciencia de la fuerza de su impulso y comprender mejor las distancias.
➤ Juego 1: saltar sobre las baldosas de colores
Enséñale a saltar más o menos lejos mientras juegas con las típicas baldosas de colores que se encajan a modo de puzzle.
➤ Juego 2: saltar en la cama elástica
Un pequeño trampolín es perfecto para que los más pequeños de la casa aprendan a saltar. Su lona limita los rebotes para evitar que ganen demasiada altura. Permanece cerca para apoyarle, y asegúrate de colocar la cama elástica lejos de cualquier objeto con la que se pueda golpear.
Con todos estos juegos, un poco de imaginación y una lista de música alegre podrás pasar un buen rato en familia disfrutando de una sesión de gimnasia infantil.
