El código de vestimenta es una de las grandes señas de identidad de Wimbledon. Te contamos en qué consiste.
El torneo de Wimbledon es sin duda una de las competiciones más emblemáticas del mundo del tenis. El código de vestimenta es una de las señas de identidad de este torneo.
Históricamente, el código de vestimenta del torneo de Wimbledon apenas ha sufrido cambios desde que se disputaran las primeras ediciones a mediados de la década de 1870. El verde de la hierba de la pista y el blanco de la ropa de los tenistas son dos de las singularidades que definen al tercer Gran Slam de la temporada.
A estas alturas es posible que en tu cabeza esté flotando la siguiente pregunta: ¿por qué el blanco frente al resto de colores? Pues bien, la respuesta tiene mucho que ver con el origen de Wimbledon.
En el momento en el que el torneo londinense comenzó a celebrarse en club privado de All England Croquet and Lawn Tennis Club, el tenis estaba considerado un deporte al que solo podía acceder la gente perteneciente a las clases altas. Por su parte, la clase obrera, que pasaba el día trabajando en el campo o en las fábricas, solía llevar sus uniformes cubiertos por machas de grasa o barro. Con el objetivo de evidenciar la diferencia social entre ambas clases, los organizadores del torneo de Wimbledon decidieron que la equipación deportiva de los participantes debía ser de un impoluto color blanco, pues es el color que mejor disimulaba las marcas de sudor.
El blanco no solo era un color que brillaba bajo los rayos del sol, haciéndolo idóneo para los meses de verano, que era cuando se jugaba tenis, sino que al ser un color que se ensuciaba muy fácilmente no resultaba práctico para los trabajadores. De hecho, el código de vestimenta de Wimbledon tiene fuerte conexión con la indumentaria propia de otro de los pasatiempos preferidos de la aristocracia británica: el cricket.
Ante las exigencias del guión, que son oficiales desde el año 1963, no han sido pocos los detractores y las polémicas que se han despertado en los últimos años. El debate sobre el tradicional código de vestimenta de Wimbledon ha terminado salpicando a grandes figuras del mundo de la raqueta como Roger Federer, que en 2013 fue criticado por el color naranja de las suelas de sus zapatillas, o Nick Kyrios, que en 2022 decidió salir a la pista con unas zapatillas y una gorra de color rojo.
Pero sí hay un caso significativo ese fue el de Andre Agassi. El tenista estadounidense llegó a negarse a participar en el Grand Slam al no estar de acuerdo con que le tuvieran que indicar la indumentaria que debía de llevar. Su ausencia en Wimbledon se produjo entre 1988 y 1990.
Por primera vez en la historia, en 2023 las jugadoras han podido usar ropa interior de color oscuro. Ante la obligación de tener salir a jugar con ropa blanca incluso durante sus días de menstruación, muchas participantes femeninas preferían no acudir a Wimbledon por la ansiedad y el estrés que les provocaba esta incómoda situación.
En los últimos años, varias jugadoras del circuito internacional han puesto en cuestión este arcaico reglamento manifestando en público su malestar y desacuerdo. Entre ellas, la británica Heather Watson, la australiana Daria Saville o la española Paula Badosa.
Finalmente, las mujeres podrán llevar un short de diferente color al blanco del resto de su indumentaria. El cambio en el reglamento se produce casualmente en el año en que la Women Tennis Association (WTA) cumple 50 años. Después de la actualización, la norma dice lo siguiente: "Cualquier ropa interior que sea o pueda ser visible durante el juego (incluso debido a la transpiración) también debe ser completamente blanca, excepto por un solo borde de color que no sea más ancho que un centímetro (10 mm), excepto las jugadoras, a las que se les permite usar ropa sólida, calzoncillos interiores de color medio/oscuro, siempre que no sean más largos que los pantalones cortos o la falda".
Ya conoces cuál es el origen y las particularidades del código de vestimenta de Wimbledon, uno de los torneos más prestigiosos del mundo del tenis y el más antiguo del circuito profesional.